Momento Hygge

HYGGE {hugue}

¿Alguna vez has escuchado del término hygge o del “arte danés de vivir bien”?

Esta palabra -pronunciada como “hugue”- proviene del noruego “bienestar” y ha estado presente en la cultura danesa desde principios del siglo XVIII. ¿Pero, por qué seguiríamos esta tradición de un país tan distante? bueno, Dinamarca ha sido considerado por múltiples estudios como uno de los países más felices del mundo.

Hygge es sobre darle a tu adulto responsable un momento de relajación. Es el arte de crear intimidad, de tomar placer en las pequeñas cosas de todos los días, de pasar tiempo con la gente que amas. Es crear una atmósfera y una experiencia que te permita ser tú y bajar la guardia por unos momentos. Hygge es el antídoto para los días lluviosos, las noches frías y la oscuridad. Ideal para disfrutar durante los meses fríos del año.

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¿Cuál es la receta para un momento hygge? 

  • Antes que nada elegir el lugar adecuado. Colócate en el espacio que te encante para acurrucarte con una manta, un libro y una taza de té, o puede ser al rededor de una mesa bien dispuesta. En soledad o con compañía. Aunque los interiores suelen ser el centro hygge por excelencia, puedes practicarlo al exterior, en contacto con la naturaleza.


  • Parte del ambiente relajante incluye el sonido: hygge es poder apreciar las gotas de lluvia en el techo, el viento golpear las ventanas, el crujir de la madera o cualquier sonido que te de paz y te haga sentir bajo resguardo.


  • La iluminación es indispensable para el hygge. Empieza por velas (pero nunca olvides ventilar muy bien la habitación al apagarlas) y algunas lámparas colocadas en puntos estratégicos para crear una atmósfera relajante. La regla de dedo es: baja temperatura de la luz, es decir, muy cálido.


  • Otro elemento primordial es la compañía, porque aunque puedes tener tu momento hygge por tu cuenta, nada como disfrutarla con unos cuantos amigos o familia.


  • El siguiente elemento es la comida: nada más hygge que el olor de pan recién horneado, o una sesión de cocina de lenta cocción. Porque el placer de la comida no sólo está en comerla sino en cocinarla junto con alguien querido. Una idea que nos encanta es elegir un tema y pedir a cada invitado que lleve ingredientes para preparar un platillo bajo esa temática. Así se crea un ambiente relajado, informal e igualitario. ¡Y no olvides la bebida! para nosotros, tu tetera debe estar siempre lista y las tazas dispuestas para el refil.


  • Otro elemento que no puede faltar es el tiempo. Estar presente en el momento y dejar cualquier interrupción lejos (como tu celular), al menos por unas horas. No puedes practicar hygge bajo estrés o con prisa. En este punto también entran a juego otros elementos: la armonía, la gratitud y la tregua (así es… nada de política o temas conflictivos durante un momento).


¿Cómo crearías tu propio momento hygge?  

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